Según explicaron fuentes policiales, el edificio terminó con varias grietas en sus paredes. A raíz de esto, un grupo de ingenieros de la Policía de San Juan fueron hasta la dependencia, la analizaron y concluyeron en que el lugar no podía ser habitable.
De esta manera, y en primer lugar, pidieron a la Justicia que agilizara los trámites para trasladar hacia el Servicio Penitenciario Provincial a los únicos dos detenidos que tenían en los calabozos. Ambos ya están en el Penal. Luego, recrearon una casilla policial, justo enfrente de la comisaría, y allí funcionará la seccional sarmientina hasta tanto les otorguen un nuevo lugar.
Por otro lado, cabe recordar que no tienen teléfono y que en esa casilla atenderá normalmente al público. Todos los detenidos irán directamente a los calabozos de la subcomisaría de Los Berros.
