Por tercer año consecutivo la Argentina se halla entre los primeros países del Índice de Miseria del mundo: en 2016 mereció el segundo lugar, como en 2014; en 2015 estuvo cuarto. La distancia entre el primer país, Venezuela una vez más, y la Argentina se explica por la crisis en que se ha hundido hace años ya el territorio que gobierna Nicolás Maduro: 573,4 puntos contra 83,8, números que se consiguen tras la suma del impacto de la inflación, el desempleo y las tasas de interés.
El índice es obra del profesor Steve Hanke, de la universidad estadounidense Johns Hopkins, y lo publica el Instituto Cato. A la suma de esas tres variables económicas se resta el porcentaje que haya cambiado del Producto Bruto Interno (PBI).
“La Argentina tiene el segundo lugar entre los más miserables, y las razones no son demasiado difíciles de descubrir”, escribió Hanke. “Luego de los años socialistas de Kirchner, la Argentina está en tránsito para alejarse de las políticas de destrucción económica, pero todavía se pueden hallar muchos residuos problemáticos“.
Otros países de América Latina se destacan en la lista: Brasil en el tercer puesto, con 75 puntos, y Colombia en el décimo, con 28.7.
“Brasil, en el número 3, es un caldo de cultivo para la corrupción y la incompetencia, como señala el reciente impeachment de la presidente Dilma Rousseff”, escribió Hanke, quien continúa el Índice de Miseria que a mediados del siglo XX creó el economista Arthur Okun, y que luego mantuvo su colega Robert Barro.
Fuente: Infobae.
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