Abuelos del centro de jubilados de Media Agua hacen tres meses que están sin atención, el médico que estaba a cargo de la atención dejó de asistir, tampoco nadie les carga los medicamentos al sistema, ni recetas. Son unos 700 los abuelos empadronados que no tienen ninguna respuesta.
Ruegan una solución inmediata, ya que están teniendo que comprar la medicación, en una grave situación económica, de inflación galopante que atraviesa el país, los abuelos tienen que elegir entre comer o la medicación.
Los médicos de Capital no les atienden los teléfonos, es muy dificultoso para un anciano viajar en colectivos, máxime aún con las altas temperaturas.
Según nos dijo una afectada Benita Correa: "nos sentimos abandonados", "estamos reclamando y pidiendo por todos lados una solución".
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