Al sector viñatero de San Juan le cayó como un balde de agua fría la noticia. El Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa) emitió una disposición que excluye a la provincia y a Mendoza de la zona libre de una plaga que afecta la producción vitivinícola. En la planilla de áreas en cuarentena por lobesia botrana figuran 15 departamentos sanjuaninos. Principalmente, los más productivos.
Los viñateros locales temen que la presencia de la "polilla de la vid", como es conocida popularmente, perjudique las exportaciones de uva sin bromurar hacia Brasil. Apenas en abril de este 2021, y tras cuatro años de impedimentos, la provincia accedió al mercado brasileño que generará un aumento en las exportaciones de la uva en fresco y permitirá a los productores locales lograr mayor competitividad. El sector vitícola está culminando los preparativos para las primeras exportaciones, que ocurrirán en la primera quincena de diciembre, siempre que sople viento en cola.
Por eso, el presidente de la Asociación de Viñateros Independientes, Juan José Ramos, se mostró preocupado por el avance de la polilla. Al ser contactado por este medio, el hombre fuerte de la actividad dijo que no tuvo acceso a la información oficial, pero que la situación de puede "generar problemas económicos serios". Aunque reconoció que, hasta ahora, la lobesia sólo ocasionó pérdidas mínimas debido al control que hacen en el sector para detenerla.
Según el informe del Senasa, los distritos afectados son: 9 de julio, Albardón, Angaco, Capital, Chimbas, Pocito, Rawson, Rivadavia, San Martín, Santa Lucía, Ullum, Zonda, 25 de Mayo, Caucete y Sarmiento. Los últimos tres representan el eje más comprometido. De hecho, en 2020, fueron los que registraron la plaga. El fenómeno no es nuevo. En 2010, la lobesia botrana llegó a Mendoza vía Chile. Y afectó a San Juan en 2012. Desde ese momento, la provincia debe combatir la plaga. Pero es la cantidad de departamentos lo que llamó la atención del dirigente viñatero. "Es un avance exagerado", definió.
No obstante, Ramos explicó que, en conjunto con el Gobierno sanjuanino, llevan adelante un ambicioso programa de desinfección. Y que los viñateros están concurriendo a capacitaciones y comprando insumos para poder mitigar el avance de la peste. "El Gobierno está fumigando y entregando productos. Se están haciendo los tratamientos", admitió.
Al respecto, se refirió el director de Sanidad Vegetal, Animal y Alimentos, Luis Kulichenki. Experto en la temática, el funcionario aclaró que el término cuarentena sólo significa que hay presencia de la lobesia botrana -que es una plaga "cuarentenaria"-, y no que la producción vitivinícola quede parada. "Es una plaga que se multiplica cuatro veces por año e intentamos frenarla para que los daños económicos sean bajos", contó. E informó que, desde el inicio de la primera alerta -primer vuelo de la polilla-, el 1 de octubre, pusieron en marcha una campaña de fumigación aérea masiva que alcanzó las 25.000 hectáreas de cuatro viñedos de los departamentos afectados.
Pero dar batalla contra la polilla de la vid no es nada fácil. Cada año deben cambiar las estrategias. Por eso, el Gobierno nacional envió 191.950 millones de pesos para ayudar. Y el Estadio sanjuanino aporta el 136 millones de pesos. De manera que se alcanzará una inversión total de 300 millones de pesos. Lo que permitirá sumar la entrega de insecticidas vía terrestre para cubrir otras 11.000 hectáreas.
