Tras la decisión de no pagar el IFE 4, como se hubiera llamado la cuarta entrega del “Ingreso Familiar de Emergencia”, el gobierno dará un bono de fin de año a beneficiarios de la Asignación Universal por Hijo (AUH) y repartirá 1,7 millones de cajas navideñas a jubilados.
La suspensión del IFE, medida que fue confirmada por el ministro de Economía, Martín Guzmán, y la titular de la Anses, Fernanda Raverta, le permitirá al fisco ahorrar en diciembre unos $ 90.000 millones. Este recorte forma parte de un intento de consolidación fiscal del gobierno, debido a la necesidad de mejorar las cuentas y disminuir la expansión monetaria del Banco Central. Parte del dinero, sin embargo, se usará para entregar un bono de fin de año a 5,2 millones de niñas y niños que, a través de sus padres o madres, son beneficiarios de la AUH.
Si bien el monto no se ha oficializado aún, el bono sería de $ 8.000, señaló la agencia NA, y se acreditaría en las cuentas del programa antes de la Navidad, un período que suele ser socialmente conflictivo. Otra iniciativa de descompresión social son planes de apoyo para jóvenes que perdieron ingresos durante la pandemia.
Además, como ya se había adelantado, el gobierno oficializará que el 20% de la AUH, de $3.540 será liquidado a todos este año, sin exigir los certificados de cumplimiento en materia de educación y de salud, debido a la pandemia.
La eliminación del tope de 5 hijos por familia para el cobro de la AUH, que ya había adelantado el gobierno, significará incluir a más de 15 mil chicos que no tenían cobertura. Y además la ANSES distribuiría otras 1.700.000 canastas navideñas entre hogares que reciben la Asignación por Hijo.
La otra pata
La otra pata del esquema de ayuda social está vinculada con los jóvenes y quienes perdieron el empleo a raíz de la pandemia. Para quienes tienen entre 18 y 29 años y estén en “situación de vulnerabilidad” actuará el Programa Potenciar Joven. Los jóvenes que presenten proyectos tendrán una beca durante 12 meses de 8.500 pesos, con el fin de acompañar sus procesos de reinserción laboral, educativa o proyectos comunitarios en distintas comunidades del país, aunque cable aclarar que este programa se empezará a aplicar en 2021.
En el caso de los trabajadores que “tienen trabajo pero perdieron ingreso”, se desplegará el plan Potenciar Trabajo, con la entrega de $ 9.400. La persona tendrá que dar una contraprestación de 4 horas de trabajo. Al respecto, el ministro de Desarrollo Social, Daniel Arroyo, dijo que su cartera impulsa la creación de 300 mil puestos de trabajo en sectores como alimentación, construcción, reciclado y tareas de cuidado, esquema que incluye la urbanización de 400 barrios populares por año y la creación de 800 Jardines de Infantes.
Además, debido al aumento del precio de alimentos, el Estado duplicará en diciembre el subsidio de la tarjeta Alimentar. Los padres con un niño menor de 6 años pasarán de recibir 4.000 pesos mensuales a 8.000. Y lo que tengan más de uno, pasarán de 6.000 pesos a 12.000, para comprar alimentos. Estas tarjetas se entregan a madres con hijos de hasta 6 años, a personas con discapacidad que reciben la AUH y a embarazadas a partir de tres meses que reciben la Asignación Universal por Embarazo (AUE). Cerca de 1.500.000 personas reciben esta tarjeta, que en el último mes del año representará unos $ 15.200 millones.
Ayer, en declaraciones radiales, el ministro de Trabajo, Claudio Moroni, había justificado la eliminación del IFE. “Era una medida extraordinaria en medio de un parate extraordinario. No tiene sentido mantener el mismo grado de ayuda de cuando la economía estaba absolutamente parada la economía ahora que estamos en actividad plena”, afirmó, descartando además que se fueran a producir problemas a fin de año. “El estado siempre ha resuelto de algún modo las cosas de fin de año. Y así será otra vez; si hay alguna necesidad será resuelta por el gobierno”.
En tanto hoy el ministro de Desarrollo Productivo, Matías Kulfas, dijo que el estado no está “retirando” la ayuda social, sino que la está “modificando” y que el Presupuesto 2021 contempla “incrementos significativos en varios puntos de la política social”
“Hicimos un reacomodamiento en los programas de la pandemia. En abril habíamos implementado el IFE y el ATP. Fue un mes en el que la industria tuvo uno de los peores desempeños en décadas y, por ejemplo, no produjo ningún auto. Pero en septiembre la producción industrial creció un 3 % respecto del año pasado”, explicó Kulfas.