En una resolución dictada el día de hoy, el juez de garantías de San Juan aprobó el acuerdo de juicio abreviado entre la defensa del imputado y la Fiscalía, y condenó a C.J.P. a 10 años de prisión de cumplimiento efectivo por el delito de abuso sexual con acceso carnal agravado por el vínculo y la convivencia con la víctima, su hija biológica, quien tenía 15 y 17 años al momento de los hechos.
Los abusos, según la investigación, ocurrieron en el domicilio familiar ubicado en el departamento Sarmiento. El primer abuso se produjo cuando la víctima tenía 15 años, en su habitación mientras miraba televisión. En esa ocasión, el padre ingresó a la habitación, se acostó junto a la menor y la agredió sexualmente. El segundo abuso ocurrió cuando la víctima tenía 17 años, en octubre de este año, cuando el acusado la llamó a su habitación y la obligó a mantener relaciones sexuales.
A pesar de que la víctima intentó contar los hechos a su madre y hermanos, no fue inicialmente creída. Sin embargo, tras una discusión con su padre en la madrugada del 22 de noviembre, la joven decidió escapar de su hogar. Después de caminar por la vía pública, fue asistida por un transeúnte que la llevó a un hospital, donde pudo contar lo sucedido.
Así comenzó la investigación que derivó en juicio abreviado. Identificado pro fuentes judiciales solamente por sus inciales, C.J.P., para proteger la identidad de la víctima, el acusado admitió ser al autor del aberrante delito en ambas ocasiones y se llegó al acuerdo que derivó en la condena del imputado: 10 años de prisión de cumplimiento efectivo por el delito de abuso sexual con acceso carnal agravado por el vínculo y la convivencia con la víctima, su hija biológica
