La cartera sanitaria informó medidas preventivas para disminuir riesgos en la salud de las personas adultas, niños y embarazadas y evitar posibles intoxicaciones por monóxido de carbono.
En esta época del año es necesario prevenir las enfermedades respiratorias, tales como: gripe, la bronquiolitis, neumonía, entre otras enfermedades.
Algunas de las recomendaciones para tener en cuenta:
- Lavarse las manos con agua y jabón después de volver de la calle, antes de cocinar o comer y después de ir al baño o cambiar pañales.
- Mantener la lactancia materna, al menos hasta que el bebé cumpla los 6 meses.
- Tener las vacunas incluidas en el Calendario Nacional de Vacunación al día para reducir las complicaciones en la salud y la mortalidad por infecciones respiratorias, en especial en los niños, embarazadas, personas con enfermedades crónicas y adultos mayores:
- Ventilar todos los ambientes a diario.
- No fumar y mantener los ambientes libres de humo. El consumo de tabaco afecta a las vías respiratorias. Asimismo, la exposición al humo de tabaco se asocia a complicaciones respiratorias ya que contiene metales pesados y sustancias cancerígenas.
- Incrementar la prevención y los cuidados especialmente en las embarazadas, los adultos mayores, los bebés y los niños. Es importante estar alerta a los primeros síntomas de una infección respiratoria, consultar inmediatamente al médico.
- No automedicarse: El consumo de remedios sin receta puede producir intoxicación y ocultar los síntomas de la enfermedad, dificultando un diagnóstico correcto y empeorando el cuadro clínico.
Otra de las recomendaciones y cuidados son evitar las intoxicaciones por monóxido de carbono:
Al comenzar las bajas temperaturas, en todos los hogares se encienden calefactores, estufas, braseros o cualquier otro método de calefacción para atenuar el frío.
Por eso es importante tener en cuenta las siguientes recomendaciones:
- Controlar los artefactos con gasistas matriculados
- Revisar que la llama tenga un color azul uniforme
- Encender y apagar los braseros y estufas a leña fuera de la casa
- No arrojar al fuego encendido, plásticos, gomas o metales
- Apagar brasas y llamas antes de dormir
- Ventilar los ambientes diariamente
- Controlar que los respiradores no estén obstruidos
- Dejar una puerta o ventana entreabierta
- No utilizar el horno o las hornallas de la cocina como calefacción
El monóxido de carbono es un gas altamente tóxico para las personas y los animales, ingresa al organismo a través de los pulmones y desde allí pasa a la sangre ocupando el lugar del oxígeno. Reduce la capacidad para transportar oxígeno de la sangre y hace que las células no puedan utilizar el oxígeno que les llega. La falta de oxígeno afecta principalmente al cerebro y al corazón.
Una mala combustión por monóxido de carbono puede provocar intoxicaciones graves, incluso la muerte. La combustión incompleta puede darse en cualquier material que contenga carbono: gas, petróleo, carbón, kerosén, nafta, madera, plásticos, etc.; en un ambiente con una concentración de oxígeno escasa o insuficiente.
Se lo llama el asesino invisible porque:
- No tiene olor
- No tiene color
- No tiene sabor
- No irrita los ojos ni la nariz
Ante la aparición de los siguientes síntomas diríjase al centro de salud más cercano:
- Sensación de mareo y/o desmayo
- Dolor de cabeza
- Falta de aire
- Náusea y/o vómitos
- Decaimiento, falta de fuerza, somnolencia